Siento que mi escritura está un poco desfasada, escribo sobre cosas que sucedieron en un lapso de tiempo desplazado a lo que vivo. Son pensamientos que mantuve hasta que pude exteriorizar, hasta darme el tiempo.
Sin embargo creo necesaria la distinción de esas entradas con las que vivo diariamente. Soy un hombre de ciclos, me gusta iniciar cosas y terminarlas. Por eso la necesidad de a pesar del tiempo, expresar mi resolución sobre Violeta. Es su nombre lo que da fin a esa parte de mis relatos.
Terminar ciclos no significa cerrar puertas, he dejado una llave bajo el tapete por si quieres visitar.
Conoce ahora lector, el otro lado del espectro: mi alegría.
Abril dio paso a Mayo y ahora llega Junio. Las cosas cambiaron.
Una vez dejado de lado el frenesí que provocara la chica de los labios rojos, tuve la oportunidad de ver más allá en mí, de apreciar el comportamiento de las personas y como he crecido aprendiendo a relacionarme, si tuviera que definir mis últimos dos meses, diría “relaciones humanas”.
Siempre fui una persona más de observar y escuchar que de actuar y hablar, y por la mayor parte de mi vida eso funcionó bien para mi, hasta que me di cuenta que ver y escuchar no es vivir. El momento en el que quise actuar, fue el momento en el que empecé a hacerlo y una parte más de mi cambió.
Dicen que para alcanzar algo que nunca has tenido, tienes que hacer algo que nunca has hecho, Así por primera vez en muchos años salí de la zona de confort en la que me encontraba y viví. Las primeras veces siempre es aterradora, pero un acierto te lleva a darte cuenta que igual puedes ser bueno en muchas cosas que no conocías y afortunadamente escogí buenas personas para relacionarme. Empecé a salir más, frecuentar lugares desconocidos, nuevos. Más pronto que tarde me di cuenta que había estado limitándome durante mucho tiempo. Tal vez aun no comprenda la forma en la que las personas de esta ciudad congenian pero definitivamente he aprendido mucho. He recuperado mi confianza y varios “me encantó conocerte” me animan a conocer más personas.
Últimamente mi fe se ha vuelto curiosamente fuerte, tiene que ver con el hecho de que he visto recompensados mis deseos, que todo lo que pienso lo materializo, soy de los que creen en la idea del enigma cuántico y que creamos nuestra propia realidad mientras la vemos, pero me han pasado tantas cosas buenas que siento la necesidad de agradecer, cuando me pasa solo puedo mirar hacia arriba y reconocer lo que no se ve.
Las últimas semanas mi ausencia de mis entradas fue debido al largo periodo de exámenes y proyectos finales que tuve en mi escuela, el cual afortunadamente ha llegado a su fin, aun así como optimista que soy, no pude evitar notar las cosas buenas que salen de ahí, tuve el semestre más difícil de mi carrera y me vi en la necesidad de hacer múltiples actividades por semanas enteras de manera consecutiva, aprendí a manejar el estrés de manera más eficaz y a no ceder ante la presión, algo que me servirá de mucho en mis meses por venir.
Estoy feliz de todo lo que he logrado hasta hoy y aunque dejo cosas atrás, solo se van para hacer espacio a mejores y nuevas cosas y personas por venir, nuevos amigos y amigas y un león que ruge para todos. Tengo mucho por aprender y más por vivir, pretendo hacerlo.
El verano está a la vuelta de la esquina y me emociona mucho, no tengo planes, solo cosas que quiero hacer y espero realizar, una vez mas me dirijo a lo desconocido, pero tengo esa sensación de nuevo en mi, algo está por suceder.