A lo largo de mi vida como lector me he encontrado con libros de todo tipo y he tratado de aventurarme en lecturas que me enriquezcan, que me sean desconocidas, que me reten o que simplemente me diviertan y me relajen. Sin embargo también existe ese pequeño grupo de libros que por una razón u otra se han tornado en una lectura extenuante y tortuosa.
Me considero un lector que trata de darle la mayor de las oportunidades a sus selecciones, sobre todo y especialmente cuando se tratan de libros que me toman más esfuerzo de lo normal y se vuelven tediosos de leer, porque a pesar de que a veces pierda el entusiasmo en alguna parte del libro siempre vale la pena ¿o no?.
La verdad es que no siempre, he terminado libros malos que jamás mejoraron, suelo obligarme a terminar de leer cada libro que empiezo ya sea por curiosidad, por la expectativa y la esperanza de que mejore o simplemente por “no dejarlo”, pero para todo hay excepciones así que también tengo libros que dejé de leer, sustituyéndolos por lecturas más estimulantes para mi, olvidándolos solo para después darme cuenta que nunca los terminé y volver a retomarlos dándoles una segunda y hasta tercera oportunidad, sobre todo si son clásicos o algún título de renombre. Así pues hace aproximadamente 2 semanas me embarqué en un tercer intento por terminar un libro que he tenido pendiente desde que llegó a mi casa por allá a finales del 2012: The Casual Vacancy.
Por aquel entonces el libro acababa de publicarse y Blu lo recibió como regalo de una de sus mejores amigas, ya que ambos al igual que yo amamos las aventuras del niño Potter. Recuerdo haber leído en repetidísimas ocasiones por parte de J.K. Rowling en numerosas entrevistas, que este sería un libro completamente a la saga de Harry Potter y sería una novela para adultos, para lo cual me puse en la disposición de no compararlo con su anterior obra. Fue este también el primer libro que intenté leer en inglés(lo cual probó no ser la mejor decisión por ser británico y por ser complejo) y fue quizás este el primer factor que tornó mi lectura lenta, en ese tiempo no tenía el dominio del inglés que tengo ahora y aunque leía textos en inglés, un libro de casi 500 páginas fue demasiado.
Tenía 18 años y mi vida era muy diferente a lo que es ahora, la trama del libro me pareció muy insípida y en poco menos de 100 páginas me di cuenta que no terminaría el libro, más que nada por lo tedioso que resultaba no entender muchas palabras. En algún momento de 2014 intenté leer el libro de nuevo en un intento por completar la lectura de mi primer libro en inglés, esta vez llegué aproximadamente a las 200 páginas y ante el recurrente tedio que me provocaba se interpuso Game of Thrones, el cual me resultó mucho más sencillo de leer, el libro volvió al polvo. En enero de este año, como reto de lectura y habiendo leído ya numerosos títulos en inglés, me propuse terminar de leer el libro de una vez por todas, 174 páginas después, lo he dejado.
No es el idioma ya un impedimento, no es mi falta de comprensión de su temática y su argumento, no es que estuviera comparándolo, simplemente no me llama la atención. Por fin pude adentrarme más en el ambiente del libro, ver lo que la autora quiere plasmar, notar la idea de la realidad humana en un pequeño pueblo, el movimiento socio-político que genera la muerte de un miembro del consejo. Creo firmemente que el argumento va más allá de esta “guerra” por un espacio en el consejo del pueblo y que se trata más sobre mostrarnos de manera “realista” el comportamiento humano, el libro tiene temáticas de sexo, abuso de drogas y demás actividades destructivas típicas la adultez, algunas las encontré forzadas, otras poco acertadas. Quizás sentí un intento muy marcado de la autora por hacer que una novela para adultos parezca adulta. Sus personajes no me atraparon demasiado y sus motivaciones me parecieron ajenas a mi. Es ahí, creo yo donde radica mi disidencia por continuar leyendo.
El no lograr relacionarme con los personajes y que no me interese por lo que les sucede es el punto decisivo que me hizo darme cuenta que simplemente perdí el entusiasmo por el libro y no tiene sentido seguir perdiendo mi tiempo retrasando otras lecturas más interesantes. Sencillamente el libro es algo que no va con mi estilo de vida y dista mucho de mi manera de pensar, creo que es quizás porque todos sus personajes están muy arraigados a el pedazo de tierra donde les tocó vivir y ninguno siente el entusiasmo que yo siento por el exterior, todos tratan de quedarse cuando yo trato de salir y conocer, lo mismo termina sucediendome con la trama, son temas crudos de los cuales he leído ya demasiado y por parte de mejores autores que ya no me atrapa, pues mi vida ya no se relaciona en nada a ellos, llegando incluso a parecerme pesimista por solo representar ese lado de la vida.
No niego que así sea la vida, ni tampoco opino que se aleje mucho de realidad pero quizás el que no presente el espectro completo fue un factor decisivo para perder mi interés, en cierta forma me recordó a lo que trataba de hacer Golding con El señor de las Moscas y la verdad me quedo con la simplicidad de su obra.
No digo que lo haya abandonado por siempre, quién sabe quizás algún día me de a la tarea de volver a leerlo quizás por curiosidad o por el puro morbo de no dejar libros inconclusos, pero se que por lo pronto estoy bien con no volverlo a leer en bastante tiempo.